Un huaico desencadenado por intensas lluvias el 1 de enero ha dejado graves estragos en el distrito de Cabana, perteneciente a la provincia de Pallasca. A las 9:22 de la mañana, un deslizamiento de tierra provocó daños significativos al sistema de abastecimiento de agua, cultivos agrícolas y a la infraestructura de un criadero de truchas en el sector de Llactabamba.
Tras una evaluación de daños realizada el 3 de enero de 2024, se confirmó que la captación que proveía de agua al caserío de Aija (conformado por 200 unidades) fue destruida. Además, se vio afectada una línea de conducción de 150 metros, así como 100 metros de la infraestructura del criadero de truchas. Las pérdidas incluyen 2.5 hectáreas de plantaciones de palta, afectando a tres familias en total, según informó el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER) Áncash.
Ante la situación, la municipalidad distrital tomó medidas inmediatas, adquiriendo una manguera de 50 metros para proveer provisionalmente de agua al caserío de Aija. También se realizaron trabajos de limpieza manual en colaboración con los residentes de Aija, retirando las rocas que comprometían la estructura del criadero de truchas en el río Llactabamba.
El 4 de enero de 2024, las autoridades locales tienen previsto identificar una nueva fuente de agua para la construcción de una captación alternativa. Además, buscarán el respaldo de maquinaria pesada para intensificar los trabajos de limpieza en el río Llactabamba. Paralelamente, las áreas de Desarrollo Social, Ambiente y Defensa Civil coordinarán la entrega de compost y humus a las familias afectadas.
Afortunadamente, no se han reportado daños a la vida y salud de las personas hasta el momento. El COER Áncash mantiene una vigilancia constante sobre la situación, asegurando una respuesta efectiva ante la emergencia.