A solicitud de la comisión de Justicia, el presidente del Congreso, Alejandro Soto, ha decidido suspender temporalmente el debate en el Pleno del Congreso sobre el dictamen que busca salvaguardar los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes frente a prácticas perjudiciales, como el matrimonio de menores de edad.
La legisladora de Fuerza Popular, Rosangella Barbarán, ha solicitado que se considere su proyecto de ley,
que persigue el mismo objetivo, con la intención de cerrar cualquier posibilidad para que los menores de
18 años contraigan matrimonio.
Durante la presentación del dictamen, la presidenta del grupo de trabajo, Janet Rivas, ha señalado que el
propósito es prohibir el matrimonio de personas menores de 18 años, lo cual conlleva la modificación y
derogación de varias disposiciones del Código Civil y del nuevo Código de Niños y Adolescentes.
Las propuestas están alineadas con las normativas nacionales e internacionales que protegen los derechos
humanos de niñas, niños y adolescentes frente a prácticas nocivas, como el matrimonio de menores de edad.
La Convención sobre los Derechos del Niño y las Naciones Unidas han señalado que el matrimonio infantil
constituye una grave violación de los derechos humanos que amenaza la vida, salud, seguridad, educación
y futuro de las niñas y niños.
Algunos países, incluido Perú, han legislado permitiendo el matrimonio por debajo de los 18 años, lo que
tiene consecuencias perjudiciales para los menores de edad, debilitando su desarrollo integral y sus oportunidades.
Las legisladoras Flor Pablo y Sigrid Bazán han expresado su apoyo a la iniciativa, destacando la urgencia
de realizar cambios en salud y educación para abordar el problema estructural de la violencia sexual.
Kira Alcarraz, de Podemos Perú, ha subrayado la necesidad de cambiar las normas para proteger a las niñas
y adolescentes en regiones donde son víctimas de violencia y venta a personas mayores.
La vocera de Perú Libre (PL), Margot Palacios, ha anunciado que su bancada respaldará la propuesta,
argumentando que votar en contra sería avalar un delito y frustrar el futuro de los menores.